Flashes bajo un bombín
En los trabajos que realizo para músicos tengo una costumbre: poner música durante la sesión.
Normalmente es música perteneciente al grupo, pero no necesariamente, puesto que el motivo de ponerla no es puro acompañamiento. De hecho soy una persona que aunque amante de la música, adora el silencio.
El objeto por tanto de poner música durante estos trabajos tiene una función: estar en sintonía con los músicos y con lo que queremos obtener de la sesión fotográfica.
En esta ocasión el trabajo lo abordamos en un directo, teniendo luego un tiempo después para fotos con la banda. Por lo que la música que nos acompañó fue la que dicha banda toca: piezas de un maestro. El maestro Sabina.
La banda: "Tributo a Sabina".
Por lo general, dejo que la música haga su trabajo en mi subconsciente. Sé que funciona. Es como entrar en un pequeño trance compartido con ellos.
Cuando el trabajo termina, el trance poco a poco también. Y el día siguiente, es otro día.
Con "Tributo a Sabina" hubo una magia especial. Estuve tooooda una semana con sus guitarras, su voz, sus sonidos ... en mi cabeza. Y por supuesto, las letras del maestro Sabina en la voz rasgada de José Peyrona.
Escogí como portada para este post esta foto que encuentras realizada con la función estrobo de mi flash puesto que quería dejar impresas las caras y distintos perfiles de estos profesionales, dado que tienen muchas facetas y en este nuevo proyecto que abordan se manejan con la misma soltura y profesionalidad que en otras aguas ya navegadas en la larga trayectoria musical que tienen. Quise de esta forma, dejar constancia de ello con mi cámara... y fue mágico el momento en que todos los componentes de la banda, en una perfecta sincronía, giraban sus cabezas a un tiempo, al ritmo de los destellos de mi flash.
Te animo a seguirlos en su facebook: Tributo a Sabina.
Dejo aquí algunas de las fotos a las que más cariño tengo de esta sesión:
